Es evidente que a lo largo de toda una carrera musical,
los setlist de un artista se formen gira tras gira con un conjunto concreto de
canciones, en general sus grandes hits y sus singles. Y con los años, algunas
de esas canciones acaban convirtiéndose en clásicos inamovibles que no
abandonan el setlist jamás. El
canadiense no es una excepción, y sus temas más conocidos siempre han sonado
sobre el escenario: Cuts Like A Knife, Summer Of ’69, Run To You, Heaven, It’s
Only Love, Can’t Stop This Thing We Started, (Everything I Do) I Do It For You,
The Only Thing That Looks Good On Me Is You, 18 Til I Die, Let’s Make A Night
To Remember, Back To You, Cloud Number Nine y When You’re Gone.
Dejando a un lado ese puñado de clásicos, el resto de
canciones han tenido un protagonismo dispar en sus conciertos. Algunas como One Night Love Affair,
She’s Only Happy When She’s Dancin’, Somebody, Kids Wanna Rock, This Time, Take
Me Back, Straight From The Heart, Lonely Nights, House Arrest y There Will
Never Be Another Tonight, asumieron bastante protagonismo a lo largo de los
años y su papel fue importante. Otras sin embargo tuvieron su oportunidad
durante una gira o dos, y no volvieron a sonar. Es ley de vida, aunque considero
que Bryan fue injusto con ciertos temas que funcionaban realmente muy bien,
como Hindin’ From Love, Remember, Win Some Lose Some, Fits Ya Good (la versión
original), Don’t Leave Me Lonely, Low Life, I Think About You (la versión
original) o Before The Night It’s Over.
Otras sí que se merecieron la retirada, tras cumplir con
su función y agotar un ciclo, como Long Gone, Touch The Hand, Hey Money – I’m
Packin’ You In!, All I Want Is You, Please Forgive Me o Do To You.
Hubo algunas canciones que llegaron a aparecer fugazmente,
descartadas enseguida porque –suponemos- bajo el punto de vista del canadiense
no cuajaron. Pasó con Another
Day, Is Your Mama Gonna Miss Ya?, Black Pearl, We’re Gonna Win, How Do Ya Feel
Tonight?, y muchas de sus últimos discos como Get Off My Back, This Side Of
Paradise, Nowhere Fast, o I Was Only Dreamin’.
Bueno, ¿y los temas que jamás ha tocado en directo?. De
todos ellos, creo que hay un puñado de muy buenas canciones que podrían haber
funcionado bastante bien y sin embargo Bryan nunca las ha considerado, o
simplemente nunca se ha molestado en añadirlas a los ensayos previos antes de
una gira. En mi opinión, habrían aportado color, y tienen poco que envidiar a
algunos de los clásicos. Este artículo pretende ser un gesto para rescatar
durante un instante a esos temas del olvido.
Wait And
See
Pertenece
a su primer disco. La verdad es que cuesta creer que no lo tocase en sus
primeras giras, donde no había mucho repertorio
que elegir. Pero fue así. Sin
ser un tema de rock auténtico, tiene ritmo y habría sonado bien, estoy seguro.
Si lo tocas con la guitarra española te sorprendes gratamente y es uno de esos
temas que gusta tocar.
What’s It
Gonna Be
Un buen tema del album Cuts Like A Knife, guitarrero y
pegadizo al puro estilo del canadiense. Trabajándolo un poco en los ensayos es
muy posible que se hubiese hecho un sitio en el setlist de la época. Una
lástima.
Home
Again
Balada del album Into The Fire que contiene uno de los
mejores solos de Keith. Las guitarras son espectaculares, y siempre me he
preguntado cómo habrían sonado en directo. Eso sí, aparentemente es una
canción difícil de cantar, pasional, con registros altos, y que requiere
dejarse la garganta, pero bueno, Bryan ha demostrado muchas veces que lo sabe
hacer muy bien ante canciones exigentes.
Not
Guilty
Muy fresca y cañera, estoy convencido de que este tema
habría funcionado a pleno rendimiento sobre los escenarios. De hecho, se grabó
muy orientada al directo. A Bryan se le escapa un ‘C’mon Keith!’ antes del solo
de Keith, muestra del espíritu directo que tiene Not Guilty.
Don’t
Drop That Bomb On Me
La versión rock original de este tema nunca se ha tocado
en un escenario, aunque una versión reggae acústica apareció en algún setlist
de 2003. Se trata de uno de los más duros y salvajes temas del canadiense de
toda su carrera. Da la impresión de que es difícil de tocar, entre otras cosas
porque las guitarras hacen muchas virguerías y cabriolas. Puede que se descartase
por su complejidad.
Fearless
Un gran tema del On A Day Like Today, que sin embargo
nunca asomó a los escenarios. Es posible que no hubiese funcionado todo lo bien
que se merece, como pasó con How Do Ya Feel Tonight?.
What Does
It Do To Your Heart
Cara B del single When You’re Gone, este tema tiene un
ritmo y un guitarreo tan pegadizo que su éxito en el escenario estaba
asegurado. Se le da un aire a una de las que mejor ha funcionado desde siempre,
Lonely Nights.
She’s A
Little Too Good For Me
Room Service no contenía ningún tema que realmente
mereciese la pena, a excepción quizás de la balada Flying y del tema que daba
nombre al disco, Room Service. El resto podían haberse quedado perfectamente
como caras B. De ellos, East Side Story y She’s A Little Too Good For Me
habrían sido unas caras B de gran calidad, de hecho, la primera de ellas casi
lo fue de un single del anterior album. La que nos ocupa, She’s A Little Too
Good For Me, tiene el ritmo y la frescura suficientes como para haber hecho un
papel digno en los conciertos, y más en los de su época, salpicados de momentos
unplugged. Eso sí, con el debido cuidado de tocarlo sin precipitaciones, para
evitar repetir lo que le sucedió a We’re Gonna Win en la gira de 1997 (lo
tocaron a una velocidad tal que parecía un pasacalles de las fiestas de un pueblo).